Instalamos parques desde cero según las indicaciones de cada cliente. En una llamada previa fijamos detalles como el presupuesto, la zona donde edificaremos el parque y fechas aproximadas de inicio de la obra. Para la creación de cada parque seguimos el siguiente proceso:

Planificación: Es el paso previo antes de realizar cualquier obra. Determinamos el espacio disponible y sus limitaciones, las necesidades que cumplirá el parque, el presupuesto disponible, los permisos requeridos, en caso de que el parque deba instalarse en un área pública, y un repaso a los estándares de seguridad que debemos cumplir.

Selección del equipo: En este punto elegimos qué equipos y materiales serán necesarios a la hora de instalar. Esto incluye las estructuras de juego, columpios, toboganes, suelos de seguridad, cercas, entre otros.

Preparación del área: Realizamos una inspección del terreno donde irá el futuro parque infantil, asegurándonos de detalles como la limpieza y nivelación del suelo. Si es necesario eliminamos obstáculos o vegetación que puedan dificultar la instalación del parque y ahorrar así tiempo y dinero.

Instalación del suelo de seguridad: Es el primer paso en la instalación en sí, ya que es donde irán instalados el resto de elementos. Ofrecemos varias opciones a la hora de colocar el suelo, pudiendo ser de césped, césped, arena, caucho u otro material de amortiguación para proteger a los niños en caso de caídas.

Instalación y montaje de las estructuras: Ya instalado el suelo, procederemos a la instalación del mobiliario. El tiempo de instalación suele variar dependiendo de la complejidad de la operación. No es lo mismo un simple tobogán que un castillo de juegos o una estructura tubular. Todo nuestro mobiliario cumple con los estándares de seguridad actuales.

Cercado: Por último se procede a rodear el parque con el vallado correspondiente, por cuestiones de seguridad y para mayor seguridad de padres y madres y que estos puedan tener más sencillo controlar a sus hijos dentro de un entorno controlado. El cercado puede presentar tanto aberturas como ser completamente cerrado, teniendo en cuenta las indicaciones dadas por el cliente en la planificación previa.

Inspección de seguridad: Una vez acabado el parque, realizamos una inspección exhaustiva para asegurarnos que todo está correctamente instalado, sin quedar piezas sueltas y que todo cumpla los estándares mínimos de seguridad, eliminando posibles bordes afilados y otros riesgos.